martes, 8 de marzo de 2011

LA FOTO Y LA NO FOTO.

Este es un ejercicio práctico de desarrollo artístico personal. 
Aunque se usa la fotografía como medio poco tiene que ver con técnicas fotográficas o algo similar, sin embargo, ayuda a desarrollar un carácter para ejercicios y familiaridades con uno mismo que luego se pueden utilizar en la fotografía. Tiene un aire muy personal. No es algo técnico, sino el alma del artista fotógrafo.

El ejercicio es el siguiente:

Habrá que elegir dos fotografías, (si la hemos realizado nosotros mejor pero si no, no pasa nada).

Una de ellas será la fotografía que más nos guste, una que tenga un significado especial o que haya algo de ella de la que nos sintamos orgullosos, o que aparezca la persona indicada...etc. Esta fotografía se colgará en un lugar visible y será un punto de apoyo en futuros proyectos fotográficos. Usarás esa foto para abrir tu mente desde muchos puntos de vista. Esta será LA FOTOGRAFÍA.

La otra a escoger será una fotografía que no nos guste en absoluto, que esté técnicamente mal hecha (sobre expuesta, desenfocada, recortada...) o que nos resulte incómoda, que aparezcan personas a las que no queremos ver, que sea triste, etc. Esta fotografía se llevará encima durante un tiempo, ya sea en el bolso, en la cartera, o dentro de un zapato, no importa. Con el tiempo la fotografía cambiará, se irá deformando, puede que se arrugue o que incluso se rompa, se nos irá haciendo familiar y al final acabará por ser una fotografía distinta, una que nos acabará gustando y a partir de la cual podremos incluso crear, la miraremos bajo un nuevo punto de vista. La superaremos. Esta será LA NO FOTOGRAFÍA.

El ejercicio finalizará cuando creamos conveniente o pensemos que las fotografías ya no pueden dar más de sí.
Este ejercicio acabará pareciendo una performance fotográfica. Un ejercicio personal en el que utilizamos cuerpo, mente y foto.

Patricia  se encuentra en realización de este ejercicio y nos explica su caso.

LA FOTOGRAFÍA: es una foto que me tomaron mis padres en una excursión al templo de Montserrat de Catalunya. Ellos me ubicaron en el centro del orbe como elemento más importante de sus vidas, de su mundo, y me dejaron allí sola, como lanzándome al mundo, a la vida, a mi futuro, como creando expectativas. El hecho de que no salga nadie más en la fotografía (bien podrían haber salido los pies de algún turista, cosa que hubiera estropeado la foto por completo) recalca el hecho de yo sola frente al universo. Creo que tiene mucha fuerza y mucha fe por parte de mis padres, y mucha inocencia por parte mía, y por supuesto está hecha con mucho amor.Puede que esté mal encuadrada, o quizá el objetivo no daba más de sí, no sé. Igualmente soy yo frente al mundo.

LA NO FOTOGRAFÍA: es una foto hecha por mí misma pero está mal enfocada, mal encuadrada, tiene mucha luz (lo que hace que no se vea prácticamente nada) y además es una fotografía de un pasado que ya no existe. Una relación que terminó y que no está del todo sanada. Son dos fantasmas los que aparecen en ella, identidades, futuro, que no existe, pasado irrecuperable. Todo con una intensidad que parece una bomba a punto de estallar y desvanecerse, algo efímero calcado de manera eterna. Me resulta incomoda llevarla en el bolso, pues es una persona que aun quiero mucho, pero también estoy interesada en ver como la imagen va evolucionando y deformándose hasta el punto de no importarme y superarlo.

LA FOTOGRAFÍA. Patricia. c.1992. Templo de Montserrat, Catalunya
LA NO FOTOGRAFÍA. Dos amantes.c. 2008. Barcelona

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